Los motores de los aviones: la gran preocupación del sector aeronáutico
Lima.– Entre los dolores de cabeza de la industria aerocomercial siempre aparecen los impuestos y tasas que encarecen los tickets, la saturación de la infraestructura aeroportuaria y los exigent...
Lima.– Entre los dolores de cabeza de la industria aerocomercial siempre aparecen los impuestos y tasas que encarecen los tickets, la saturación de la infraestructura aeroportuaria y los exigentes requerimientos de los gobiernos para reducir las emisiones de dióxido de carbono. Sin embargo, a esos problemas este año se sumó una complicación adicional: los desperfectos en los motores de los aviones, que en la región habrían dejado en tierra a unas 600 aeronaves a la fecha.
El tema dominó el panel de CEOs del ALTA AGM and Airline Forum, que se celebró en la capital de Perú, a tal punto que cada empresa terminó detallando en qué medida está afectada.
“En la región operan 1000 aviones, así que estamos hablando de que tenemos en tierra el 60% de todo lo que se mueve. No hay un precedente como este. Nunca vivimos una situación así. Todos queremos eficiencia, pero estamos llegando a niveles en los que se percibe que las empresas lanzaron tecnología antes de tiempo y las aerolíneas somos los conejillos de indias”, afirmó Roberto Alvo, presidente del comité ejecutivo de la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA) y CEO de LATAM Airlines Group.
“Necesitamos una aviación eficiente, pero con la tranquilidad de que los millones de dólares que gastamos vuelen. Este problema va a seguir hasta el fin de esta década. No hay que ser ingenuos, pero lo que debemos aprender es que cuando se lancen los aviones, la tecnología tiene que estar madura, porque los que sufren son los pasajeros con cancelaciones a boca de jarro”, agregó.
Por su parte, Frederico Pedreira, COO de Avianca Group, señaló que les preocupa la falta de confiabilidad en la prevención. “Estamos sufriendo, pero los fabricantes no parecen estar aprendiendo de la experiencia. Son eternos optimistas de que los problemas se van a arreglar y el pasajero es el impactado. A nosotros nos tocó hacer cambios en temporada alta. Que sean más realistas a la hora de hacer planes”, sostuvo.
En la misma línea, Estuardo Ortiz, CEO y fundador de Jetsmart, dijo que las empresas productoras “fueron muy optimistas respecto del desgaste que iban a tener los motores” y que estos “no están durando lo que deberían durar”.
“La pregunta es qué tipo de garantías tenemos que tener como industria. Hemos tenido saltos tecnológicos que no salieron bien. Es una gran llamada de atención. Hay que exigir a los fabricantes garantías, porque si bien las aeronaves ahorran combustible y emiten menos dióxido de carbono, esto es así cuando operan. Si no operan, no”, apuntó.
En este punto, Pedro Heilbron, CEO de Copa Airlines, trató de distender el ambiente: “Yo he decidido no hablar mal del camello, porque si hablas mal del camello, cuando te toque venderlo no vas a poder”. Más allá del tono, reconoció que se trata de un problema generalizado.
En tanto, Holger Paulmann, presidente ejecutivo de Sky Airline, fue más contundente. “La nueva tecnología de motores permite un ahorro en combustible del 17%, pero eso hace subir el precio del avión y del motor. Con lo cual no tenés un ahorro del 17%, sino la mitad, y si no se cumplen las promesas en términos de durabilidad, no es barato. El costo final va al pasajero. En principio lo absorbemos las líneas aéreas, pero luego el que termina pagando es el cliente”, aseguró.
En este sentido, sostuvo que la lección es que hay que crear una dinámica de responsabilidad para los nuevos diseños y su tecnología. “En diez años nos van a prometer más ahorro, y hay que ver si pisamos el palito. Airbus y Boeing tienen que estar reflexionando. Durante todo el ownership de los aviones tenés que tener la garantía de que vas a operar”, continuó.
Por último, cada uno de los CEOs detalló cómo está afectada su flota por este problema. En el caso de Sky, tiene cuatro aviones en tierra, de un total de 36; Jetsmart, ocho de 50; Avianca, nueve de 150 (pero cinco de 16 wide body); y Latam, 24 de 360.
La única línea aérea que aseguró no tener aviones en tierra por desperfectos en los motores es Copa Airlines.